Triste noticia: fallece el Padre Efrén Silva Plascencia, rector del Seminario de Irapuato
mayo 30, 2025José Juan Ramírez
Irapuato, Gto. (Opinión Bajío).- Este 30 de mayo, una noticia entristeció a la sociedad y feligresía de la región, al confirmarse el deceso por enfermedad del querido sacerdote y actual rector del seminario Diocesano Efrén Silva Plascencia.
El sacerdote se caracterizó por una gran labor pastoral pero también social y se convirtió en uno de los pilares de apoyo para cientos de familias desamparadas en la crisis del COVID 19, ya que durante la pandemia, en coordinación con laicos y la sociedad civil, estableció Las Cruzadas de Esperanza, mediante la cual consiguió y repartió alimentos y despensas para quien lo necesitara.
El Padre Efrén Silva Plascencia, nació en Atotonilco el Alto, Jalisco, el 18 de junio de 1958. Sus padres fueron el señor Antonio Silva Ramírez (+) y la señora Ma. Guadalupe Plascencia Valle. Se trasladaron a la ciudad de Irapuato, Guanajuato cuando él Padre Efrén tenía 12 años, buscando un futuro más prometedor.
Su vocación al sacerdocio fue patente desde la infancia, siendo un factor de ella, la religiosidad popular del pueblo de Atotonilco y también la vida ejemplar de los santos que leía en revistas, las cuales fueron definiendo su vocación. Fundamental fue la oración de su papá Antonio (+), que añoraba tener un hijo sacerdote.
Así, el 09 de Septiembre de 1971, llegó al Seminario Diocesano de León, Guanajuato, para comenzar su formación sacerdotal.
Fue ordenado sacerdote el 2 de julio de 1984 por Monseñor Jerónimo Prigione, en la Catedral de León. Entre las encomiendas eclesiales que le dieron y labor como párroco en las siguientes Parroquias:
- San Miguel Arcángel – León, Gto.
- Sagrado Corazón de Jesús – Irapuato, Gto.
- Nuestra Señora de los Remedios – Pénjamo, Gto.
- San Martín de Porres – Irapuato, Gto.
- Nuestra Señora de los Dolores – Irapuato, Gto
- Rector del Seminario Diocesano
En varias ocasiones, el padre Efrén señaló que “Si volviera a nacer, nuevamente sería sacerdote”, ya que el sacerdote pide a Dios su gracia y fortaleza para seguir buscando la salvación del prójimo y la propia.
Enfatizó que, “en este tiempo de tantas tormentas, como la pandemia, el ambiente de violencia, y de todo eso que no nos gusta”, no estamos solos, el Señor sigue caminando con nosotros.
“Cristo camina con nosotros”, era una de sus tantas frases.
FUNDACIÓN DEL MOVIMIENTO ULTRECO (Último Tren Conyugal)
El Padre Efrén Silva Plascencia, cuando tuvo la gracia de convivir con el Santo Pontífice Juan Pablo II, quedó inspirado por el interés que él mostraba por la familia y los matrimonios y fue así que el 24 de Mayo del 2001, fundó el movimiento ULTRECO (Último Tren Conyugal), con el apoyo de 7 matrimonios y escasos recursos, pero con enormes ganas de hacer algo grandioso.
El movimiento ULTRECO, fue diseñado en un primer encuentro de matrimonios y posteriormente reuniones semanales por un mínimo de dos años, el objetivo es que se fortalezca a las parejas en la convicción sacramental del matrimonio, apostando por él como un camino a la felicidad, especialmente en parejas con situaciones difíciles extremas y en matrimonios que deseaaban fortalecer su relación, proveyéndolas de herramientas para saber enfrentar y resolver problemas de manera adecuada.
Este movimiento ayudó a incrementar la unión familiar, a bajar los índices de violencia intrafamiliar, bajaron los índices de maltrato infantil, lo que provocaba la deserción escolar y bajo rendimiento escolar o suicidios, evitó el aumento de drogadicción en jóvenes y niños, de varias zonas de la ciudad.
Con ello el Padre Efrén Silva Plascencia logró llevar el mensaje evangelizador a matrimonios de diferentes ciudades, pues se preocupaba porque lo que se vivía en la mayor parte de los municipios de Guanajuato, y dejar la semilla sembrada para que este movimiento lo repliquen los matrimonios en su lugar de origen, a la fecha lo han vivido parejas de Valle de Santiago, Pénjamo, Salamanca, Huanimaro, León, Celaya, Irapuato, etc., e inclusive de otras entidades de la República Mexicana.
CRUZADAS DE ESPERANZA
Este proyecto se diseñó al estar trabajando para el retiro familiar de Cuaresma 2020 “Señor, muéstranos tu esperanza”, ya que al organizarlo el Padre Efrén Silva Plascencia cuando estaba en la Parroquia de los Dolores, sintió el deseo de apoyar a todos los Irapuatenses que estuvieran sufriendo por la pandemia originada por el COVID-19, por falta de trabajo, de comida o por otros problemas.
Fue así que con un grupo de ciudadanos de diferentes zonas de la Ciudad de Irapuato, el Padre Efrén, expuso este deseo y viéndolo todos factible se comenzó a diseñar la estructura, creándose así en Abril 2020 el equipo de trabajo denominado “Cruzadas de Esperanza”, equipo que apoyó a Irapuatenses, tanto de zona urbana, como de zona rural, así como a ciudadanos de diferentes municipios del Estado de Guanajuato que lo solicitaban, entregando diversos apoyos.
Es importante destacar que el entusiasmo y trayectoria del Padre Efrén, provocó que muchas personas se sumaran a esta cruzada a través de aportaciones de alimentos, medicinas y material de curación, así como gel antibacterial. Se implementó la acción de donar cubrebocas a la ciudadanía Irapuatense, como estrategia para combatir los contagios por el COVID-19.
Gracias a la vinculación del Padre Efrén Silva con organismos empresariales, se lograron becas para otorgárselas a personas vulnerables y/o que perdieron su empleo por la contingencia COVID-19.
APOYO AL CONVENTO DE LAS MADRES CLARISAS
Conociendo la necesidad de la falta de recursos económicos para la manutención de las madres que habitan el Monasterio de las Clarisas, y terminar la construcción de una zona en el monasterio, se decidió apoyarlas con el servicio de entrega a domicilio de la comida que ellas elaboraban, ya que los integrantes de Cruzadas de Esperanza, repartían en sus vehículos personales, la comida y al final del día cuando se terminaba de repartir la comida, se les entregada a las madres el dinero recaudado para el Monasterio.
El Padre Efrén Silva Plascencia siempre se distinguió por su gran deseo de servir más allá de lo que era su deber como sacerdote, por sus acciones, por brindarse a través de los años a la ciudadanía Irapuatense en general, sin importarle las fronteras de la parroquia que se le asignaba.
El Padre Efrén Silva Plascencia, no solo se preocupó porque sus feligreses estuvieran bien espiritualmente, se preocupaba porque tuvieran que comer, que calzar y que cobijarse, porque los niños tuvieran un juguete en sus manos el día de Reyes. En la pandemia, de COVID 19, fue una luz de esperanza en medio del temor y el dolor.
Así, el Padre Efrén Silva Plascencia se convirtió en un referente de la labor sacerdotal, la cercanía con la gente y la esperanza en el futuro.
Descanse en Paz el Padre Efrén Silva Plascencia.